En el año 1948 las Naciones Unidas aceptaron la validez del Estado Judío llamado Israel. La creación del estado judío cumplió una profecía de suma importancia en el escenario profético, ya que la creación de Israel cumplió varias profecías. Una de estas profecías se encuentra en los Salmos y otra se encuentra contenida en la enseñanza sobre la higuera en Mateo 24:32.
Si partimos de la interpretación de que la Higuera representa a Israel, cuando las hojas estén tiernas y el verano se acerque podría referirse al final de la era de la Iglesia. En tal enseñanza se nos dice que la generación que presencie el nacimiento de la higuera (Israel), no "pasará" sin que todas los acontecimientos reservados para la Gran Tribulación (Mateo 24) sucedan.
Algunos sostienen que una generación es 40 años. Sin embargo, pasaron 40 años a partir del renacimiento de Israel y el Rapto de la Iglesia no sucedió. Pero aunque Israel era una nación, Jerusalén todavía no era su capital. Israel recobró a Jerusalén a principios de los 60 y muchos analistas proféticos consideran que es a partir de ese momento cuando debemos comenzar a contar la "generación" para que "esas cosas comiencen a suceder".
Pastor Dawlin A. Ureña