|
<<<<<---Capítulos 1-21
<<<<<---Capítulos 21-40
<<<<<---Capítulos 41-60
Capítulos 81-108 ---->>>>>
Capítulo 61
1 He aquí que en esos días vi como unas cuerdas largas fueron dadas a esos
ángeles y ellos se colocaron alas y volaron hacia el norte.
2 Le pregunté al ángel diciéndole: "¿Por qué han tomado esas cuerdas y se han
ido?". El me dijo "Se han ido a medir".
3 El ángel que iba conmigo me dijo: "Ellos llevan a los justos las medidas de
los justos y las cuerdas de los justos para que se apoyen en el nombre del Señor
de los espíritus por los siglos de los siglos.
4 "Los elegidos comenzaron a residir con el Elegido y esas son las medidas que
serán dadas para fe y que fortalecerán la justicia.
5 "Estas medidas revelarán todos los misterios de las profundidades de la tierra
y los que han sido destruidos por el desierto o tragados por las fieras o por
los peces del mar, esos podrán regresar sostenidos por el día del Elegido,
porque ninguno será destruido ante el señor de los espíritus, ninguno podrá ser
destruido.
6 "Todos los que habitan en lo alto del cielo han recibido un mandamiento, un
poder, una sola voz y una luz como fuego.
7 "A él con sus primeras palabras lo bendijeron, ensalzaron y alabaron con
sabiduría y han sido sabios en la palabra y el espíritu de vida.
(Hb 5.12)
8 "El Señor de los Espíritus colocó al Elegido sobre el trono de gloria y el
juzgará todas las obras de los santos y sus acciones serán pesadas en la
balanza.
9 "Cuando alce la cara para juzgar sus vidas secretas según la palabra del
nombre del Señor de los espíritus, su sendero por la vía del juicio justo del
Señor de los espíritus, entonces a una sola voz hablarán, bendecirán,
glorificarán, exaltarán y proclamarán santo el nombre del Señor de los
espíritus.
10 "Él convocará a todas las huestes de los cielos, a todos los santos, a las
huestes de Dios, a los Querubines, a los Serafines, a los Ofanines, a todos los
ángeles de poder, a todos los ángeles de los principados y al Elegido y a los
demás poderes sobre la tierra y sobre el agua.
(Ef 1:21; Cl 1.16; 1P 3:22)
11 Ese día ellos elevarán una sola voz, bendecirán, alabarán y exaltarán en
espíritu de fidelidad, en espíritu de sabiduría, en espíritu de paciencia, en
espíritu de misericordia, en espíritu de justicia, en espíritu de paz y en
espíritu de verdad y dirán a una sola voz: "Bendito es Él y bendito sea el
nombre del Señor de los espíritus para siempre y por toda la eternidad.
12 "Todos los que no duermen en el cielo alto le bendecirán; todos los santo que
están en el cielo te bendecirán; todos los elegidos que habitan en el jardín de
la vida y todo espíritu de luz que sea capaz de bendecir, alabar, ensalzar y
proclamar santo tu nombre y toda carne glorificará y bendecirá tu nombre más
allá de toda medida por los siglos de los siglos.
13 "Porque grande es la misericordia del Señor de los espíritus, Él es paciente
y todas sus obras y toda su creación las ha revelado a los justos y a los
elegidos, en nombre del Señor de los espíritus .
Capítulo 62
1 Así ordenó el Señor a los reyes, a los poderosos, a los dignatarios y a todos
los que viven sobre la tierra, diciendo: "Abrid los ojos y levantad vuestras
frentes por si sois capaces de reconocer al Elegido".
2 El Señor de los espíritus se sentó en su trono de gloria, el espíritu de
justicia se esparció sobre Él y la palabra de su boca exterminó a todos los
pecadores e injustos y ninguno de ellos subsistirá frente a Él.
(Ap 19:15)
3 Ese día todos los reyes y los poderosos y los que dominan la tierra se
levantarán, le verán y le reconocerán cuando se siente sobre el trono de su
gloria; la justicia será juzgada ante Él y no se pronunciará palabra vana frente
a Él.
4 El dolor vendrá sobre ellos como a una mujer en un parto difícil, cuando su
hijo viene por la abertura de la pelvis y sufre para dar a luz.
(Mc 13:8)
5 Se mirarán los unos a los otros aterrorizados, bajarán la mirada y la pena se
apoderará de ellos cuando vean a este Hijo de Mujer sentarse sobre el trono de
su gloria.
(Dn 7:13; Mt 25:31; Mc 14:62)
6 Y los reyes, los poderosos y todos los que dominan la tierra alabarán,
bendecirán y ensalzarán a quien reina sobre todo lo que es secreto.
7 Porque desde el principio el Hijo del Hombre fue ocultado y el Más Alto lo
preservó en medio de su poder y lo reveló a los elegidos.
8 La asamblea de los elegidos y los santos será sembrada y todos los elegidos se
sostendrán en pie en ese día;
9 pero los reyes, los poderosos, los dignatarios y los que dominan la tierra
caerán ante Él sobre sus rostros, adorarán y pondrán su esperanza en este Hijo
del Hombre, le suplicarán y le pedirán misericordia.
10 Sin embargo, el Señor de los espíritus los apremiará para que se apresuren a
salir de su presencia, avergonzará sus caras y las tinieblas se acumularán sobre
sus rostros;
(Mt 25:41)
11 Él los entregará a los de castigo para ejecutar la venganza porque han
oprimido a sus hijos, a sus elegidos.
12 Serán un espectáculo para los justos y los elegidos, quienes se alegrarán a
costa de ellos, porque la ira del Señor de los espíritus cayó sobre ellos y su
espada se emborrachó con su sangre.
13 En cambio los justos y los elegidos serán salvados ese día y nunca más le
verán la cara a los pecadores ni a los injustos.
14 El Señor de los espíritus residirá sobre ellos y con este Hijo del Hombre
comerán, descansarán y se levantarán por los siglos de los siglos.
15 Los justos y los elegidos se habrán levantado de la tierra, dejarán de estar
cabizbajos y se vestirán con prendas de gloria.
(1Co 15:53)
16 Tales serán las prendas de vida del Señor de los espíritus: vuestra ropa no
envejecerá y vuestra gloria no terminará ante el Señor de los espíritus.
(2Co 5:2)
Capítulo 63
1 En esos días los reyes, los poderosos y los que dominan la tierra suplicarán a
los ángeles del castigo, a quienes habrán sido entregados, para que les den un
poco de descanso, y puedan postrarse ante el Señor de los espíritus, adorarlo y
reconocer sus pecados ante Él.
(Lc 16:23-31)
2 Bendecirán y alabarán al Señor de los espíritus y dirán: "Bendito es el Señor
de los espíritus, Señor de reyes, Señor de los poderosos, Señor de los ricos,
Señor de gloria, Señor de sabiduría;
3 "Sobre todas las cosas secretas es esplendoroso tu poder de generación en
generación y tu gloria por los siglos de los siglos; profundos e innumerables
son tus misterios e inconmensurable es tu justicia.
4 "Ahora hemos aprendido que debemos alabar y bendecir al Señor de los reyes
pues reina sobre todos los reyes".
(Mt 23:39)
5 Y ellos dirán: "Ojalá hubiera descanso para glorificar y dar gracias y
confesar nuestra fe ante su gloria.
6 "Ahora suspiramos por un pequeño descanso, pero no lo encontramos, insistimos
pero no lo obtenemos; la luz se desvanece ante nosotros y las tinieblas son
nuestra morada por los siglos de los siglos.
7 "Porque ante Él no hemos creído ni hemos alabado el nombre del Señor de los
espíritus y en cambio nuestras esperanzas estuvieron en el cetro de nuestro
reinado y en nuestra gloria.
8 "Así, el día de nuestro sufrimiento y tribulación Él no nos ha salvado y no
encontramos tregua para confesar que nuestro Señor es veraz en todas su obras y
su justicia y que en su juicio no hace acepción de personas.
(Si 42:1; St 2:5-9)
9 "Desaparecemos de su presencia a causa de nuestras obras y todos nuestros
pecados han sido contabilizados justamente."
10 Después ellos se dirán: "Nuestras almas están llenas de riquezas injustas
pero ellas no nos preservan de descender en medio del peso de la muerte".
(Lc 16:9)
11 Luego, sus rostros estarán llenos de oscuridad y de vergüenza ante el Hijo
del Hombre, serán expulsados de su presencia y la espada permanecerá frente a
sus caras.
(Mt 26:64)
12 Entonces dijo el Señor de los espíritus: "Tal es la sentencia y el juicio con
respecto a los poderosos, los reyes, los dignatarios y aquellos que dominaron la
tierra frente al Señor de los espíritus".
Capítulo 64
1 Después, vi otras figuras ocultas en ese lugar.
2 Escuché la voz de un ángel diciendo: "Estos son los Vigilantes que
descendieron sobre la tierra y le revelaron a los humanos lo que era secreto y
los indujeron a pecar".
Capítulo 65
1 [En esos días Noé vio que la tierra estaba amenazada de ruina y que su
destrucción era inminente;
2 y partió de allí y fue hasta los extremos de la tierra; le gritó fuerte a su
abuelo Enoc y le dijo tres veces con voz amargada: "¡Escúchame, escúchame,
escúchame!"
3 Yo le dije: "Dime, ¿Qué es lo que está pasando sobre la tierra para que sufra
tan grave apuro y tiemble? Quizá yo pereceré con ella".
4 Tras esto hubo una gran sacudida sobre la tierra y luego una voz se hizo oír
desde el cielo y yo caí sobre mi rostro".
5 Y Enoc, mi abuelo vino, se mantuvo cerca de mí y me dijo: "¿Por qué me has
gritado con amargura y llanto?".
6 Después fue expedida un orden desde la presencia del Señor de los espíritus
sobre los que viven en la tierra, para que se cumpliera su ruina, porque todos
han conocido los misterios de los Vigilantes, toda la violencia de los Satanes,
todos sus poderes secretos, el poder de los maleficios, el poder de los
hechiceros y el poder de quienes funden artículos de metal para toda la tierra:
7 cómo la plata se produce del polvo de la tierra, cómo el estaño se origina en
la tierra,
8 pero el plomo y el bronce no son producidos por la tierra como la primera,
sino que una fuente los produce y hay un ángel prominente permanece allí.
9 Luego, mi abuelo Enoc me tomó por la mano, me levantó y me dijo: "Vete,
porque le he preguntado al Señor de los espíritus sobre esta sacudida de la
tierra;
10 Él me ha dicho: "Por causa de su injusticia se ha determinado su juicio y no
será detenido por mí nunca porque las brujerías que ellos han buscado y
aprendido, la tierra y los que habitan en ella, serán destruidos".
11 En cuanto a esos ángeles, no habrá lugar para su arrepentimiento, porque han
revelado lo que era secreto y están malditos, pero en cuanto a ti, hijo mío, el
Señor de los espíritus sabe que eres puro, y sin culpa ni reproche al respecto
de los secretos.
12 "Él ha destinado tu nombre entre los santos y te preservará entre los que
viven sobre la tierra. Él ha destinado tu linaje para la realeza y para grandes
honores y de tu semilla brotará una fuente de justos y de santos innumerables,
por siempre.
Capítulo 66
1 Después me mostró los ángeles de castigo que estaban listos para venir y
desatar la fuerza de las aguas que están debajo de la tierra.]
2 [y el Señor de los espíritu le mandó a los ángeles que iban saliendo que no
levantaran las aguas sino que las represarán, ya que estos ángeles estaban
encargados de la potencia de las aguas.]
3 [Y yo me retiré de la presencia de Enoc.]
Capítulo 67
1 [En esos días la palabra del Señor del universo vino a mí y Él me dijo: "Noé,
tu destino ha llegado hasta mí, un destino sin mancha, un destino de amor y
rectitud.
2 "Ahora los ángeles están construyendo una casa de madera y cuando terminen su
tarea, extenderé mi mano sobre ella y la preservaré y la semilla de vida
germinará de ella y se producirá un cambio para que la tierra no quede
desocupada.
3 "Yo consolidaré tu linaje ante mí para siempre, diseminaré a los que viven
contigo y no será estéril, sino será bendecida y multiplicada sobre la
superficie de la tierra en el nombre del Señor".
4 Él encarcelará a los Vigilantes que han demostrado injusticia, en este valle
ardiente que antes me había mostrado mi abuelo Enoc en el occidente, cerca de
las montañas de oro, plata, hierro, estaño y plomo.
5 Vi ese valle donde había gran perturbación y agitación de aguas.
6 Cuando todo esto ocurrió, de aquel ardiente metal fundido y desde la
agitación, en ese lugar se produjo un olor a azufre y se mezcló con las aguas y
ese valle donde estaban los Vigilantes que habían seducido a la humanidad, arde
bajo la tierra.
7 De sus valles salen ríos de fuego donde son castigados esos Vigilantes que han
seducido a quienes habitan sobre la tierra.
8 Esas aguas servirán en estos días a los reyes, a los poderosos y a los
dignatarios y a aquellos que habitan sobre la tierra, para salud del cuerpo y
para castigo del espíritu, pero su espíritu está lleno de codicia y su carne
será castigada porque han rechazado al Señor de los espíritus. Serán castigados
diariamente y aun así no creerán en el Señor de los espíritus.
9 Tanto como su cuerpo es quemado severamente , se produce un cambio en su
espíritu por los siglos de los siglos, porque nadie profiere una palabra vana
ante el Señor de los espíritus.
10 Porque el juicio vendrá sobre ellos a causa de que ellos creen en el deseo de
su carne y rechazan al Espíritu del Señor.
11 En esos días hubo en esas aguas un cambio, pues cuando los Vigilantes son
castigados en ellas las fuentes de agua cambian de temperatura, y cuando los
ángeles suben las aguas se vuelven frías.]
12 Oí a Miguel hablar y decir: "Este juicio en el que los Vigilantes son
sentenciados es un testimonio para los reyes y los poderosos que dominan la
tierra;
(2P 2:4)
13 porque estas aguas de castigo proporcionan salud a los cuerpos de los reyes y
curan la concupiscencia de su carne, sin embargo ellos no creen ni ven que esas
aguas cambiarán y se convertirán en fuego que arderá para siempre".
(Mt 3:12)
Capítulo 68
1 [Después de eso, mi abuelo Enoc me dio la explicación de todos los misterios
en un libro y en las parábolas que le habían sido dadas y él las reunió para mí
en las palabras del Libro de las Parábolas.]
2 Ese día Miguel habló y le dijo a Rafael: "El poder del Espíritu me transporta
y me hace estremecer a causa de la severidad del juicio por los secretos y del
castigo de los ángeles. ¿Quién podrá soportar la rigurosa sentencia que ha sido
ejecutada y frente la cual ellos se deshacen?".
3 Miguel habló de nuevo y le dijo a Rafael: "¿Existe alguien cuyo corazón no sea
tocado por esto y cuyos riñones no se turben por esta sentencia proferida contra
aquellos que han sido arrojados?".
4 Pero sucedió que cuando Miguel llegó ante el Señor de lo espíritus, le dijo a
Rafael: "No haré la defensa de ellos a los ojos del Señor, pues el Señor de los
espíritus está furioso con ellos, porque se comportaron como si fueran el Señor.
5 "Por esto, todo lo que es secreto vendrá contra ellos por los siglos de los
siglos; pues ni ángel ni humano recibirán su porción, pero ellos han recibido
sus sentencia por los siglos de los siglos".
Capítulo 69
1 Después de este juicio estarán llenos de estupor y los harán temblar porque
ellos han revelado aquello a los humanos que habitan la tierra.
2 He aquí los nombres de estos Vigilantes: Shemihaza, quien era el principal y
en orden con relación a él, Ar'taqof, Rama'el, Kokab'el, -'el, Ra'ma'el,
Dani'el, Zeq'el, Baraq'el, 'Asa'el, Harmoni, Matra'el, 'Anan'el, Sato'el,
Shamsi'el, Sahari'el, Tumi'el, Turi'el, Yomi'el, y Yehadi'el.
3 Y los que siguen son los nombres de sus ángeles, de sus jefes de centenas y
cincuentenas.
4 El primero es Yeqon, éste indujo a todos los hijos del cielo y los hizo
descender sobre la tierra y los sedujo con las hijas de los hombres.
5 El nombre del segundo es Asbe'el, éste dio un mal consejo a los hijos del
cielo y los condujo a corromperse a sí mismos con las hijas de los hombres.
6 El nombre del tercero es G'adri'el, este mostró a las hijas de los hombres
todas las formas de dar muerte, fue él quien sedujo a Eva y él es quien enseñó a
los hijos de los hombres los escudos, las corazas, las espadas de combate y
todas las armas de muerte;
7 desde su mano ellos han procedido en contra de quienes viven en la tierra
desde ese día y por todas las generaciones.
8 El nombre del cuarto es Panamu'el, éste mostró a los hijos de los hombres lo
amargo y lo dulce y les reveló todos los secretos de su sabiduría:
9 les enseñó a los humanos a escribir con tinta y papiros y son muchos los que
se han descarriado a causa de ello, desde el comienzo hasta este día.
10 Porque los hombres no han sido traídos al mundo con el propósito de afianzar
su creencia en la tinta y el papel,
11 sino que los humanos han sido creados con la intención de que vivieran puros
y justos para que la muerte que todo lo destruye no pudiera alcanzarles. Pero
por culpa de este conocimiento suyo, el poder de ella me devora.
12 El nombre del quinto es K'asdeya'el, este mostró a los hijos de los hombres
todas la plagas de los espíritus y los demonios: la plaga de embrión en el
vientre para que aborte, la mordedura de serpiente, la plaga que sobreviene con
el calor de mediodía, el hijo de la serpiente cuyo nombre es Taba'et.
13 Esta es la tarea de K'asbe'el, mostró a los santos el jefe del juramento,
cuyo nombre es B'iq'a.
14 Éste pidió a Miguel que le revelase el nombre secreto para que el lo
mencionara en el juramento, porque aquellos que han revelado a los hijos de los
hombres todo lo que es secreto, tiemblan ante este nombre.
15 He aquí que el poder de este juramento es fuerte y poderos y Él dispuso este
juramento Aka'e, en la mano de Miguel.
16 Estos son los secretos de este juramento: ellos son fuertes en su juramento y
el cielo fue suspendido antes de que el mundo fuera creado;
17 por ello la tierra ha sido cimentada sobre el agua y desde lo más recóndito
de las montañas provienen aguas hermosas, desde la creación del mundo hasta la
eternidad;
18 debido a este juramento el mar ha sido creado y para su cimiento en el tiempo
de la cólera Él le ha dado arena y ella no se atreve a irse más allá desde la
creación del mundo hasta la eternidad;
19 por este juramento las profundidades son firmes y estables y no se mueven de
su sitio, desde la eternidad hasta la eternidad;
20 por este juramento el sol y la luna cumplen su ruta sin desobedecer sus
leyes, desde la eternidad hasta la eternidad;
21 por este juramente las estrellas siguen su curso, Él las llama por su nombre
y ellas le responden, desde la eternidad hasta la eternidad.
22 [De igual forma los espíritus del agua, de los vientos y de todas las brisas
desde todas las regiones de la tierra.
23 Allí son preservadas la voz del trueno y la luz del relámpago y allí son
preservados los depósitos del granizo, la escarcha, la nieve la lluvia y el
rocío.
24 Todos estos son fieles y dan gracias ante el Señor de los espíritus y le
alaban con todas sus fuerzas y su alimento está en toda acción de gracias y
agradecen, alaban y ensalzan el nombre del Señor de los espíritus por los siglos
de los siglos.]
25 Este juramento es poderoso y a través de él, sus senderos son preservados y
su curso no será destruido.
26 Y hubo gran alegría entre ellos, bendijeron alabaron y ensalzaron al Señor,
porque les ha sido revelado el nombre de este Hijo del Hombre.
27 El se sentó sobre el trono de su gloria y la suma del juicio le ha sido dada
al Hijo del Hombre y Él ha hecho que los pecadores sean expulsados y destruidos
de la faz de la tierra;
28 y los que han descarriado al mundo serán atados con cadenas y en el lugar
donde habían sido reunidos para la destrucción serán encarcelados y todas sus
obras desaparecerán de la faz de la tierra.
(Ap 20:1-3)
29 A partir de entonces nada se corromperá, porque este Hijo del Hombre ha
aparecido y se ha sentado en el trono de su gloria, toda maldad se alejará de su
presencia y la palabra de este Hijo del Hombre saldrá y se fortalecerá ante el
Señor de los espíritus. Esta es la tercera parábola de Enoc.
Capítulo 70
1 Y sucedió después esto: que su nombre fue elevado en vida, arriba hacia este
Hijo del Hombre y hacia el Señor de los espíritus, lejos de los que viven en la
tierra;
(Gn 5:24; Si 44:16; Sb 4:10-11; Hb 11:5)
2 y fue elevado sobre el carro del espíritu y el nombre desapareció de entre
ellos.
3 Desde ese día no fui contado más entre ellos y Él me hizo sentar entre dos
regiones, entre el norte y el occidente, allí donde los ángeles habían tomado
cuerdas para medir para mí el lugar para los elegidos y los justos.
4 Allí vi a los primeros padres y a los justos que desde el comienzo habitan en
ese lugar.
Capítulo 71
1 Y ocurrió entonces que mi espíritu fue trasladado y ascendió a los cielos y vi
a los hijos de Dios. Ellos caminaban sobre llamas de fuego, sus ropas eran
blancas y su cara resplandecía como el cristal.
2 Vi dos ríos de fuego, la luz de este fuego brillaba como el jacinto y caí
sobre mi rostro ante el Señor de los espíritus.
3 El ángel Miguel me tomó de la mano derecha, me levantó y me condujo dentro de
toso los misterios y me reveló los secretos de los justos;
(Dn 12:1)
4 me reveló los secretos de los límites del cielo y todos los depósitos de las
estrellas, de las luminarias, por donde nacen en presencia de los santos.
5 El trasladó mi espíritu dentro del cielo de los cielos y vi que allí había una
edificación de cristal y entre esos cristales, lenguas de fuego vivo.
(Ac 2:34)
6 Mi espíritu vio un círculo que rodeaba de fuego esta edificación y en sus
cuatro esquinas había fuentes de fuego vivo.
(Ap 21:11)
7 Al rededor de ella había Serafines, Querubines y Ofanines, estos son los que
no duermen y vigilan el trono de su gloria.
8 Vi innumerables ángeles, miles y miles, miríadas y miríadas rodeando esa
edificación
9 y a Miguel, Rafael, Gabriel y Sariel y a una multitud de santos incontable.
10 Con ellos estaba la cabeza de los Días, su cabeza era blanca y pura como la
lana y sus vestidos eran indescriptibles.
11 Caí sobre mi rostro, todo mi cuerpo desmayó, mi espíritu fue trasfigurado,
grité con voz fuerte, con espíritu de poder y bendije, alabé y exalté.
12 Estas bendiciones que salieron de mi boca fuero consideradas agradables ante
esta Cabeza de los Días.
13 Y esta Cabeza de los Días vino con Miguel, Gabriel, Rafael y Sariel y una
multitud innumerable de ángeles.
14 Vino a mí, me saludó con su voz y me dijo: "Este es el Hijo del Hombre que ha
sido engendrado por la justicia, la justicia reside sobre él y la Cabeza de los
Días no le abandonará".
(Dn 7:13; Za 6:12)
15 Me dijo: "Él proclamará sobre ti la paz, en nombre del mundo por venir,
porque desde allí ha provenido la paz desde la creación del mundo y así la paz
estará sobre ti para siempre y por toda la eternidad.
(Is 9:5)
16 Todo andará por su camino y mientras, la justicia no lo abandonará jamás, con
Él vivirá, con Él su herencia y de Él no será separada nunca ni por toda la
eternidad.
(Sal 85:11-14)
17 Serán muchos días con este Retoño del Hombre y la paz y el camino correcto
será para los justos en nombre del señor de los espíritus, eternamente.
(Is 11:1; 53:2; 60:21)
Libro sobre el Movimiento de las Luminarias Celestiales [Astronómico]
Capítulo 72
1 El Libro del Movimiento de la Luminarias Celestiales, las relaciones entre
ellas, de acuerdo con su clase, su dominio y su estación, cada una según su
nombre y el sitio de su salida y según sus meses, las cuales Uriel, el santo
ángel que estaba conmigo y que es su guía, me mostró y me reveló todas sus leyes
exactamente como son y como se observan todos los años del mundo, hasta la
eternidad, hasta que se complete la nueva creación que durará hasta la
eternidad.
2 Esta es la primera ley de las luminarias, la luminaria del sol, que tiene su
nacimiento en las puertas orientales del cielo y su puesta en las puertas
occidentales del cielo.
3 Vi seis puertas donde el sol nace y seis puertas donde el sol se oculta, y la
luna nace y se oculta por esas puertas, así como los líderes de las estrellas y
quienes los guían a ellos. Son seis puertas al oriente y seis al occidente, una
tras la otra en riguroso orden y además muchas ventanas a la derecha y a la
izquierda de esas puertas.
4 Primero allí aparecía la gran luminaria cuyo nombre es el sol y cuya
circunferencia es como la circunferencia del cielo y está totalmente lleno de un
fuego que alumbra y abrasa.
5 El viento lleva el carro en el que él asciende y el sol se oculta y retorna a
través del norte para regresar al oriente y es conducido para que entre por esa
puerta y brille en la faz del cielo.
6 En esta forma nace en el primer mes por la gran puerta que es la cuarta.
7 En esta cuarta puerta por la cual el sol nace el primer mes hay doce ventanas
abiertas de las cuales procede una llama cuando están abiertas en su estación.
8 Cuando el sol nace viene desde esa cuarta puerta por treinta mañanas seguidas
y se pone exactamente por la cuarta puerta en el occidente del cielo.
9 Durante este período cada día llega a ser más largo que el anterior y cada
noche llega a ser más corta que la anterior:
10 En ese momento el día se ha alargado en una novena parte a costa de la noche:
el día equivale a diez partes y la noche exactamente a ocho partes.
11 El sol nace por esa cuarta puerta y se pone por la cuarta y vuelve a la
quinta puerta oriental a las treinta mañanas y nace por la quinta puerta y se
pone por la quinta puerta.
12 Entonces el día se ha alargado en dos partes y es de once partes y la noche
es más corta y es de siete partes.
13 Y retorna al oriente y entra en la sexta puerta y nace; y se oculta por la
sexta puerta durante treinta y una mañanas, por cuenta de su signo.
14 En ese momento el día es más largo que la noche, el día llega a ser el doble
de la noche y equivale a doce partes y la noche es acortada y equivale a seis
partes.
15 Entonces el sol se eleva para acortar el día y alargar la noche y el sol
regresa al oriente para entrar por la sexta puerta y nace por ella, y se pone,
durante treinta mañanas.
16 Y cuando las treinta mañanas han pasado el sol ha disminuido en una parte
exactamente y equivale a once partes y la noche a siete.
17 El sol sale del occidente por esa sexta puerta y va al oriente y nace por la
quinta puerta durante treinta mañanas y se pone en el occidente, de nuevo por la
quinta puerta.
18 En ese momento el día disminuye en otra parte y equivale a diez partes y la
noche a ocho.
19 El sol va desde esa quinta puerta y se oculta por la quinta puerta del
occidente y nace por la cuarta puerta durante treinta y un mañanas a causa de su
signo y se oculta por el occidente.
20 En ese momento el día es igual a la noche, llegan a ser equivalentes: la
noche tiene nueve partes y el día nueve partes.
21 El sol que nace por esa puerta y se oculta por el occidente, , nace por la
tercera puerta por treinta mañanas y se pone al occidente por la tercera puerta.
22 En ese momento la noche es más larga que el día y que las noches anteriores y
cada día es más corto que el día anterior hasta la trigésima mañana; la noche
equivale exactamente a diez partes y el día a ocho.
23 El sol que nace por aquella tercera puerta y se pone por la tercera puerta en
el occidente, regresa para salir por el oriente y nace por la segunda puerta
durante treinta mañanas y así mismo se pone por la segunda puerta al occidente
del cielo.
24 En ese momento la noche equivale a once partes y el día a siete.
25 El sol que sale durante ese período por esa segunda puerta y se pone al
occidente por la segunda puerta, vuelve al oriente por la primera puerta durante
treinta y una mañanas y se oculta por la primera puerta al occidente del cielo.
26 En ese momento la noche se ha alargado hasta llegar a ser dos veces el día:
la noche equivale exactamente a doce partes y el día a seis.
27 El sol que ha recorrido las secciones de sus órbitas, vuelve de nuevo sobre
ellas y entra por cada una de sus puertas durante treinta mañanas y se pone al
occidente por la opuesta.
28 Entonces la noche disminuye una parte su duración y la noche equivale a once
partes y el día a siete.
29 El sol ha regresado y ha entrado por la segunda puerta del oriente y retorna
por las secciones de su órbita durante treinta mañanas naciendo y ocultándose.
30 En ese momento la duración de la noche disminuye y equivale a diez partes y
el día a ocho.
31 Entonces el sol nace por la segunda puerta y se pone por el occidente y
vuelve al oriente y nace por la tercera puerta durante treinta y una mañana y se
pone al occidente del cielo.
32 En ese momento la noche se ha acortado y equivale a nueve partes y el día
equivale a nueve partes, la noche es igual al día y el año tiene exactamente
trescientos sesenta y cuatro días.
(Jubileos 6:32)
33 La duración del día y de la noche y el acortamiento del día o de la noche,
son señaladas por el recorrido del sol.
34 Así en ese recorrido el día se alarga y la noche se acorta.
35 Ésta es la ley del recorrido del sol y su retorno, según la cual el vuelve y
nace sesenta veces, así la gran luminaria que se llama sol, por los siglos de
los siglos.
36 La que se levanta es la gran luminaria, nombrada según su propia apariencia,
como lo ha ordenado el Señor.
37 Así como nace se oculta, sin decrecer ni descansar, sino recorriendo día y
noche; y su luz brilla siete veces más que la de la luna, aunque al observarlos
a ambos tengan igual tamaño.
Capítulo 73
1 Después de esta ley, vi otra ley, que trata sobre la pequeña luminaria, cuyo
nombre es luna.
2 Su circunferencia es como la circunferencia del cielo y el carro en el cual
monta y la luz le es dada con mesura;
3 y cada mes su nacimiento y su puesta se modifican; sus días son como los días
del sol y cuando su luz es plena, es la séptima parte de la luz del sol.
4 Así nace: en su primera fase nace del lado del oriente el trigésimo día y en
la época en que ella aparece es para vosotros el principio del mes sobre el
trigésimo día, simultáneamente cuando el sol está en la puerta por la cual nace.
5 Es visible en la mitad de la séptima parte; toda su circunferencia está vacía
sin luz, con excepción de medio séptimo, la catorceava parte de su luz.
6 Y cuando recibe medio séptimo de su luz, su luz se incrementa la mitad de la
séptima parte de ella.
7 Se pone con el sol y cuando el sol nace la luna nace con él y recibe la mitad
de una séptima parte de luz y en esa noche, en el comienzo de su mañana, la luna
se oculta con el sol y es invisible esa noche en sus catorceavo o en el medio
séptimo.
8 Ella nace en ese momento exactamente con una séptima parte y sale y se inclina
hacia el nacimiento del sol y en el resto de sus días llega a brillar en las
otras trece partes.
Capítulo 74
1 He visto otra ruta, una ley para ella, cómo por medio de esta ley se cumple el
movimiento de sus meses.
2 Todo esto me lo mostró Uriel, el ángel santo que el el líder de todos ellos,
anotó su posición tal y como él me la ha revelado y anotó sus meses tal y como
son y el aspecto de su luz hasta que se cumplan quince días.
3 En cada séptima parte ella cumple su luz al oriente y en cada séptima parte
ella cumple su oscuridad al occidente.
4 En ciertos meses ella altera sus puestas y en ciertos meses ella sigue su
propio curso.
5 Son dos los meses en que la luna se oculta con el sol, por las dos puertas que
está en la mitad, la tercera y la cuarta.
6 Ella sale por siete días, vira y retorna por la puerta por donde sale el sol.
7 Cuando el sol sale por la séptima puerta, ella sale por siete días, hasta que
nace por la quinta y vira y regresa de nuevo durante siete día por la cuarta
puerta, completa toda su luz, se aleja y entra por la primera puerta durante
ocho días.
8 Ella retorna durante siete días por la cuarta puerta por la que sale el sol.
9 Así he visto su posición, cómo la luna sale y el sol se pone durante esos
días.
10 Si añadimos cinco años el sol tiene un excedente de treinta días y todos los
días que suma uno de estos cinco años al completarse, son trescientos sesenta y
cuatro días.
11 El excedente del sol y las estrellas llega a seis día, en cinco años de a
seis días por año son treinta días y a la luna le faltan treinta días con
respecto al sol y las estrellas.
12 El sol y las estrellas llevan completo el año exactamente, tanto que ellos no
adelantan ni retroceden su posición ni un sólo día por toda la eternidad y
completan los años con perfecta justicia cada trescientos sesenta y cuatro días.
13 En tres años hay mil noventa y dos días, en cinco años, mil ochocientos
veinte días y en ocho años dos mil novecientos doce días.
14 Pero para la luna sola sus días en tres años llegan a mil sesenta y dos y a
los cinco años le faltan cincuenta días,
15 Ella tiene en cinco años mil setecientos setenta días y así hay para la luna
durante ocho años, dos mil ochocientos treinta y dos días.
16 A los ocho años le faltan ochenta días.
17 El año se cumple regularmente según las estaciones del mundo y la posición
del sol, que sale por las puertas por las cuales nace y se oculta durante
treinta días.
Capítulo 75
1 Los jefes de las cabezas de mil que están encargados de toda la creación y de
todas las estrellas tienen qué hacer con los cuatro días intercalados, siendo
inseparables de su obra de acuerdo con el cómputo del año, tienen que prestar
servicio durante cuatro días que no son contabilizados.
2 Por esta causa los hombres se equivocan pues estas luminarias prestan servicio
exactamente a las estaciones del mundo, una por la primera puerta , otra por la
tercera, otra por la cuarta y otra por la sexta puerta y la armonía del mundo se
cumple en trescientos sesenta y cuatro estaciones.
3 Porque los signos, los tiempos, los años y los días me los mostró Uriel, el
Vigilante a quien el Señor de gloria ha encargado de todas las luminarias del
cielo y en el mundo, para que reinen sobre la faz del cielo, sean vistas desde
la tierra y sean las guías del día y de la noche, así el sol la luna, las
estrellas y todas las criaturas auxiliares que recorren sus órbitas en los
carros del cielo.
4 De la misma forma Uriel me mostró doce puertas abiertas en el recorrido de los
carros del sol en los cielos; por ellas salen los rayos del sol y se expande el
calor sobre la tierra cuando están abiertas en las estaciones que le son
asignadas.
5 [Ellas sirven también para los viento y el espíritu del rocío cuando están
abiertas en los límites de los cielos.]
6 Son doce las puertas del cielo en los confines de la tierra, de las cuales
salen el sol, la luna, las estrellas y toda creación en el cielo al oriente y al
occidente;
7 y hay numerosas ventanas abiertas a su derecha y a su izquierda y cada ventana
esparce calor en su estación; ellas corresponde a esas puertas por las que salen
las estrellas y se ocultan de acuerdo con su número, según lo ha mandado Él.
8 He visto en los cielos carros que recorren el mundo por encima de esas puertas
y en ellos ruedan las estrellas que no se ocultan.
9 Hay uno más grande que todos, que le da la vuelta al mundo entero.
Capítulo 76
1 En los límites de la tierra he visto doce puertas abiertas para todas las
regiones; por ellas salen los vientos y desde ellas soplan sobre la tierra.
2 Tres de ellas están abiertas sobre la faz del cielo, tres al occidente, tres a
la derecha del cielo y tres a la izquierda.
3 Las tres primeras son las que están al oriente, las tres siguientes al al sur,
las tres siguientes al norte y las tres siguientes al occidente.
4 Por cuatro de ellas salen los vientos que son para la curación de la tierra y
para su vivificación, y por ocho salen los vientos perjudiciales que cuando son
enviados destruyen toda la tierra, las aguas y todo lo que hay en ellas, lo que
crece, florece o repta, tanto en las aguas como en la tierra seca y todo lo que
vive en ella.
5 Primero sale el viento del oriente por la primera puerta oriental y se inclina
hacia el sur. Por allí sale la destrucción, la sequía, el calor y la desolación
6 Por la segunda puerta, la del medio, sale el viento del Este-Este: la lluvia,
los frutos, la reanimación y el rocío. Por la tercera puerta sale el viento del
nororiente que está cerca del viento del norte: frío y sequía.
7 Detrás de ellos, por las tres puertas que están al sur de los cielos, sale en
primer lugar por la primera puerta un viento del sur que está al sur y al
oriente un viento de calor.
8 Por la segunda puerta sale un viento del sur al que llaman sur: rocío, lluvia,
bienestar, reanimación.
9 Por la tercera puerta sale un viento del suroccidente: rocío, lluvia, langosta
y destrucción.
10 Tras este, sale un viento norte que viene de la séptima puerta, hacia el
oriente, con rocío, lluvia, langostas y desolación.
11 De la puerta del medio sale directamente un viento con salud, lluvia, rocío y
prosperidad. Por la tercera puerta, la que se inclina al occidente, viene un
viento con nubes, escarcha, nieve, lluvia, rocío y langostas.
12 Después de estos están los vientos del occidente. Por la primera puerta, que
está inclinada hacia el norte, sale un viento con rocío, escarcha, frío, nieve y
helada.
13 Por la puerta de en medio sale un viento con rocío, lluvia, prosperidad y
bendición. A través de la última puerta, la que se inclina al sur, sale un
viento con carestía, ruina, quema y desolación.
14 Se acabaron las doce puertas de los cuatro puntos cardinales del cielo. Te he
enseñado su explicación completa ¡Oh, hijo mío, Matusalén!.
Capítulo 77
1 Al oriente lo llaman este porque es el primero; al sur lo llaman mediodía
porque allí habita el Grande y en Él reside el Bendito por siempre.
2 Al gran punto cardinal lo llaman poniente porque allí van las estrellas del
cielo, por allí se ponen y por allí se ocultan, por eso lo llaman poniente.
3 Al norte lo llaman norte porque en el se esconden, se reúnen y se vuelven
todos los astros del cielo y se dirigen hacia el oriente de los cielos. Al
oriente lo llaman levante porque desde allí se alzan los cuerpos celestes y
desde allí se levantan. Vi tres secciones de la tierra: una para que en ella
habiten los hijos de los hombres, otra para todos los mares y los ríos y otra
para Los Siete y para el Paraíso de Justicia.
4 Vi siete montañas más altas que todas las montañas que hay sobre la tierra, la
nieve las cubre y de ellas vienen los días , las estaciones y los años.
5 Vi siete ríos sobre la tierra, más grandes que todos los ríos, uno de los
cuales viene del occidente y sus aguas desembocan en el Gran Mar.
6 Otros dos vienen desde el norte hacia el mar y sus aguas desembocan en el Mar
de Eritrea.
7 Los otros cuatro salen del lado del norte cada uno hacia su respectivo mar:
dos de ellos hacia el Mar de Eritrea y dos dentro del Gran Mar.
8 Vi siete grandes islas en el mar y el continente, dos hacia el continente y
cinco en alta mar.
Capítulo 78
1 [Los nombres del sol son los siguientes: el primero es Oranyes y el segundo
Tomás;
2 y la luna tiene cuatro nombres: el primero es Asonya, el segundo Ebela, el
tercero Benase y el cuarto Era'el.]
3 Estas son las dos grandes luminarias, su circunferencia es como la
circunferencia del cielo y la talla de sus dos circunferencias es similar.
4 Dentro de la circunferencia del sol hay siete partes de luz que le son
añadidas de más con respecto a la luna y con completa mesura le es transferida a
ella hasta la séptima parte extraída al sol.
5 Ellas se ponen y entran por las puertas del occidente, hacen su viraje por el
norte y vuelven por las puertas del oriente sobre la faz del cielo.
6 Cuando la luna se levanta, la mitad de un séptimo de su luz brilla en los
cielos para aparecer sobre la tierra y se completa de día en día, hasta el día
catorce cuando toda su luz está completa.
7 Su luz crece por quinceavos y se completa de día en día hasta el día quince,
en el cual toda su luz está completa, según el signo de los años. La luna crece
y realiza sus fases de a medios séptimos.
8 En su fase menguante la luna disminuye su luz: el primer día un catorceavo; el
segundo, un treceavo; el tercero, un doceavo; el cuarto, un onceavo; el quinto,
un décimo; el sexto, un noveno; el séptimo, un octavo; el octavo, un sétimo; el
noveno, un sexto; el décimo, un quinto; el undécimo, un cuarto; el duodécimo, un
tercio; el treceavo, un medio; el catorceavo la mitad de un séptimo; hasta que
el quinceavo desaparece todo remanente de luz.
9 En ciertos meses tiene veintinueve días y otras veces veintiocho días.
10 Y Uriel me enseñó otro cálculo, habiéndome mostrado cuando la luz es
transferida a la luna y sobre cual lado se la transfiere el sol.
11 Durante toda la fase creciente de la luna, se transfiere su luz frente al sol
durante catorce días hasta que se ilumina toda y su luz es completa en el cielo.
12 El primer día es llamada luna nueva, porque desde ese día su luz crece.
13 Llega a ser luna llena exactamente en el momento en que el sol se oculta por
el occidente y ella asciende desde el oriente por la noche y la luna brilla
durante toda la noche, hasta que el sol nace frente a ella y la luna es
observada frente al sol.
14 Por el lado por que la luz de la luna llega, por ahí decrece de nuevo, hasta
que toda su luz desaparece, los días del mes se completan y su circunferencia
está vacía, sin luz.
15 Por tres meses ella sale de treinta días y en su tiempo ella sale por tres
meses de veintinueve días cada uno, en los cuales ella cumple su menguante en el
primer período de tiempo y en el primer portal, por cinto setenta y siete días.
16 En el tiempo de su nacimiento ella aparece por tres meses de treinta días
cada uno y por tres meses aparece veintinueve días cada uno.
17 En la noche ella aparece por veinte días cada mes.
Capítulo 79
1 Hijo mío: ya te he enseñado todo y la ley de todas las estrellas de los cielos
ha concluido.
2 Me ha enseñado todas su leyes para todos los días, para todas las estaciones
imperantes, para todos los años y su finalización, para el orden prescrito para
todos los meses y todas las semanas, por veinte días cada mes;
3 y el menguante de la luna que comienza a través de la sexta puerta en la cual
se completa su luz,
4 que ocurre en el primer portal en su tiempo y se completa a los ciento setenta
y siete días o contado en semanas, veinticinco semanas y dos días.
5 Ella se atrasa exactamente cinco días en el curso de un período, con respecto
del sol y del orden de las estrellas y al ocurrir esto es corregida. Parece como
la imagen de una visión cuando su luz se atrasa.
6 Cuando ella se encuentra en su plenitud, en la noche esta visión parece como
un hombre, en la noche aparece como la imagen del sol en el cielo y no hay nada
más en ella, salvo su luz. Tal es la visión y la imagen de todas las luminarias,
que me mostró Uriel, el gran ángel.
Capítulo 80
1 En esos días Uriel me dirigió la palabra y me dijo: "Mirad que te he revelado
todo, Enoc, te he enseñado todo para que pudieras ver este sol, esta luna, las
guías de las estrellas de los cielos y todos aquellos que las hacen recorrer y
sus tareas, tiempos y salidas.
2 En los días de los pecadores los años serán acortados y su semilla llegará
tarde a sus tierras y campos; todas las cosas sobre la tierra se alterarán y no
saldrán a su debido tiempo; la lluvia será retenida y los cielos la retendrán.
3 En esa época los frutos de la tierra serán retenidos, no crecerán a tiempo los
frutos de los árboles, serán retardados;
4 la luna alterará su orden y no aparecerá a su debido tiempo
5 [En esos días el sol será visto [en el cielo ardiente extendiendo la
esterilidad y] viajará por la noche sobre el límite del gran carro del
occidente] y brillará más que lo que corresponde al orden de su luz.
6 Muchas guías de las estrellas trasgredirán el orden, alterarán sus órbitas y
tareas y no aparecerán en el momento prescrito para ellas.
7 Todas las leyes de las estrellas serán ocultadas a los pecadores; los
pensamientos de quienes viven sobre la tierra estarán errados al respecto y
ellos equivocarán sus caminos y tendrán a las estrellas como dioses.
(Sb 13:2; Ro 1:25)
8 El mal se multiplicará sobre ellos y el castigo contra ellos llegará para
aniquilarlos a todos.
<<<<<---Capítulos 1-21
<<<<<---Capítulos 21-40
<<<<<---Capítulos 41-60
Capítulos 81-108 ---->>>>>
Regrese al Índice
Regrese a la Página Principal
[Página Principal | En qué creemos | ¿Deseas ser salvo? | Galería | Defienda su Fe | Enlace o intercambie banners con nosotros | Preguntas a los Evolucionistas | Testimonios | Niños | Prédicas y Estudios del Doctor Ureña | Enlaces]
|
¿QUIERE BUSCAR UN ARTÍCULO, SERMÓN O VIDEO POR TEMA? (Gracia, Salvación, Pornografía, Pecado, Dinosaurios, Masturbación, Nephillim, Perdón, Cash Luna, sexualidad, etc.) HÁGALO AQUÍ... Sólo sitios recomendados por ADF |
|