Sobre la literalidad de este inmenso número, existen dos vertientes interpretativas.

1. Sin importar si los integrantes de este inmenso ejército son hombres o son seres demoníacos, lo que sí creo firmemente es que el número, la cantidad, es literal. En otras palabras, trátese de un ejército integrado por Chinos, Japoneses, Norcoreanos, Hindúes, etc., o trátese de una armada de seres angélicos caídos, nosotros en Ministerios Antes del Fin sostenemos y creemos que la Biblia debe tomarse literalmente en lo referente a este número.

¿Son ángeles caídos o demonios o son soldados?

Para tratar de encontrar una solución a esta importante pregunta, usemos la Palabra.

Recordemos lo que sucedió en Apocalipsis 12:4. Una tercera parte de los ángeles que estaban en el cielo, se revelaron y se fueron con Satanás.      

¡Estos ángeles que fueron arrojados a la tierra junto a Satanás podrían haber sido muchos! En realidad no sabemos exactamente cuántos ángeles existían en el cielo cuando sucedió esta "guerra", pero se nos dice que…

Es exegéticamente sano interpretar que Satanás se trajo consigo una gran cantidad de estas "estrellas" o ángeles rebeldes para la tierra.

¿Dónde están estos ángeles ahora?

La Biblia nos dice que muchos de estos ángeles han sido guardados en presiones especiales y que tienen su papel para los días más duros de la Gran Tribulación.

Si estudiamos el contenido de Apocalipsis 14:13 vemos lo siguiente:

Y es inmediatamente a continuación de esto donde la Biblia nos agrega

Visto desde este punto de vista, es lógico que muchos interpreten que este inmenso ejército podrían ser todos o parte de la 1/3 parte que fue expulsado del cielo cuando Satanás se reveló contra Dios.

2. Pero la segunda posición sostiene que cuando la Biblia dice que solamente "cuatro" ángeles, los que claramente deben ser parte de la 1/3 parte que fue expulsado del cielo cuando Satanás se reveló contra Dios, son los responsables por desquiciar a los ejércitos del oriente (China, Japón, Norcorea, etc.) y hacerlos que vengan en guerra contra Israel y contra el Anticristo, que tal vez todavía esté tratando de engañar al mundo y trate de reforzar el Tratado de Paz que firmó entre Israel y los árabes.

Los que sostienen esta posición última también usan el argumento de que si Juan estaba hablando de ángeles en el verso anterior, por qué ahora cambia totalmente y habla de "jinetes de a caballo" para describir este increíblemente numeroso ejército.

Sin embargo, debemos realzar aquí que tan pronto como la Biblia dice que estos 200 millones vienen a caballo, también se proporciona una descripción que si bien no es debida a que Juan no pudo encontrar otras palabras para describir armamentos modernos, y por tanto desconocidos para él, bien podría tratarse de seres sobrenaturales, porque se nos dice que los integrantes de este ejército tenían las "cabezas de los caballos como cabezas de leones, y de sus bocas salía fuego, humo y azufre. Por estas tres plagas fue muerta la tercera parte de los hombres: por el fuego, el humo y el azufre que salía de sus bocas, pues el poder de los caballos estaba en sus bocas y en sus colas, porque sus colas, semejantes a serpientes, tenían cabezas y con ellas dañan.".

¿Acaso no es esta la forma de Juan describir armamentos que él no conocía?

Esta posición es totalmente plausible. De hecho, en un artículo anterior, yo hago un análisis del porqué un hombre fruto del primer Siglo, habría utilizado este tipo de lenguaje pictórico y hasta cierto punto fantástico, para describir elementos de un ejército moderno (tanques, helicópteros, aviones, etc.).

En resumen, es totalmente posible que se trate de seres angélicos o que se trate, como yo creo, de un ejército real. Sé bien que un ejército como este nunca se ha ensamblado en la historia de la humanidad, pero esa es la misma razón por la que a las cosas inmensas, la prensa hoy día le llama "de proporciones apocalípticas", porque en el Apocalipsis se describen cosas que sucederán durante la Gran Tribulación, que no han sucedido nunca ni sucederán de nuevo en la historia del hombre.

Pastor Dawlin A. Ureña
Cambita, S.C., República Dominicana

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