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Conforme nos dice la Enciclopedia Wikipedia, "Tito Flavio Josefo también conocido por su nombre hebreo José ben Matityahu o Josefo ben Matityahu (n. 37-38 - Roma, 101) fue un historiador judío parcial a la secta de los fariseos, descendiente de familia de sacerdotes. Josefo era un hombre de acción, estadista y diplomático. En Roma escribió, en griego, sus obras más conocidas: La guerra de los judíos, Antigüedades judías y Contra Apión. Fue considerado como un traidor a la causa judía y odiado por los judíos. Su obra se ha conservado gracias a los romanos y a los cristianos."
Como vemos, Josefo no era un "Cristiano" o seguidor de la secta que según los romanos, se agolpó alrededor de Jesús, el de Nazaret. Como estadista, escritor e historiador no parcial a ninguna otra creencia judaica, excepto a la que veían los fariseos, quienes eran enemigos jurados de Jesús y sus enseñanzas, sus testimonios son de gran importancia, ya que resultan ser confiables para cristianos y no cristianos. En otras palabras, nunca se parcializó con el cristianismo.
El historiador judío Flavio Josefo, a finales del primer siglo, hace menciones muy interesantes acerca de personajes bíblicos como Herodes, Poncio Pilato, Félix, Festo, Santiago y Juan el bautista. Respecto a Jesús de Nazaret, también existen menciones que confirman lo relatado en los evangelios, y que representan un duro golpe contra aquellos que se oponen a la historicidad de Cristo.
Hace poco salió un necio por ahí diciendo que Jesús "había sido una invención del imperio romano… que no había evidencia alguna del Jesús histórico del Nuevo Testamento…" entre otras atrocidades literarias… Pero, ¿Qué nos dice un enemigo historiador de Jesús?
Una de las menciones más conocida de Josefo hacia Jesús, se conoce por la obra el "Testimonio Flaviano", y mucho escépticos argumentan que se trata de una interpolación cristiana posterior, debido a que un judío no pudo haber escrito lo que ahí se dice de Jesús.
Pero, veamos el "Testimonio":
"Por ese tiempo apareció Jesús, un hombre sabio, si es correcto llamarlo hombre, ya que fue un hacedor de milagros impactantes, un maestro para los hombres que reciben la verdad con gozo. Atrajo hacia Él a muchos judíos y a muchos gentiles además. Era el Cristo. Y cuando Pilato, frente a la denuncia de aquellos que son los principales entre nosotros, lo había condenado a la Cruz, aquellos que lo habían amado primero no le abandonaron ya que se les apareció vivo nuevamente al tercer día, habiendo predicho esto y otras tantas maravillas sobre Él los santos profetas. La tribu de los cristianos, llamados así por Él, no ha cesado de crecer hasta este día." Antigüedades XVIII, 63
Si bien es verdad que Josefo jamás creyó que Jesús fuese el mesías, esto no representa ninguna evidencia para descalificar todo el pasaje como falso. En ese capítulo, Josefo hace referencia al gobierno de Pilato, y por tanto, en este contexto histórico, seria los más adecuado hacer mención del origen del cristianismo, religión ampliamente difundida en su tiempo.
También existen frases que los cristianos en ninguna manera usarían, como el describir a Jesús como un "hombre sabio", o referirse al cristianismo como "una tribu fundada por él". El hecho de que Josefo mencione a Jesús unos capítulos más tarde (Antigüedades XX, 197), indican que ya lo habría mencionado previamente, algo que no tendría coherencia si el Testimonio Flaviano no fuera veraz.
Lo más lógico sería concluir que parte del texto es verdadero, y parte interpolada por copistas cristianos posteriormente.
La postura que ahora defendemos se confirmó en 1972, cuando el profesor Schlomo Pines, de la Universidad judía de Jerusalén, anuncio el descubrimiento de un manuscrito árabe del historiador melquita Agapio, del siglo X, en el que el pasaje de Josefo queda expresado de una manera apropiada para un judío y que corresponde de una forma tan estrecha a las anteriores proyecciones hechas por eruditos acerca de lo que Josefo habría escrito originalmente.
¿Qué dice esta versión?:
"Por aquel tiempo existió un hombre sabio llamado Jesús y su conducta era buena y era sabido que era virtuoso. Atrajo a muchos judíos y a muchos gentiles. Pilatos lo condenó a ser crucificado y a morir. Pero los que habían venido a ser discípulos suyos no abandonaron el discipulado. Informaron que se les había aparecido tres días después de la crucifixión y que estaba vivo. Por ello, quizá fue el Mesías acerca de quien los profetas habían dicho maravillas. Y la tribu de los cristianos, así llamada por él, no ha desaparecido hasta el día de hoy."
Conclusión
No existe evidencia que indique que el Testimonio Flaviano se trate de una interpolación, por el contrario, existen evidencias historiográficas, que evidencian su veracidad y hoy, 2,000 años después, si usted prefiere creerle a materialistas, ateos, musulmanes, etc., que alegan, sin base histórica, lo contrario a los testimonios ciertos de personas como Josefo, que no era un "Fan" de Jesús y el Cristianismo, pues allá usted, pero la historia y las evidencias apoyan nuestra creencia en Jesús, crucificado y resucitado - y hacedor de maravillas. Aleluya!
Pastor Dawlin A. Ureña
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