En el escenario económico la tendencia apunta a la pobreza de las masas y la concentración de riqueza en las manos de unas cuantas personas. Estos concentradores de la riqueza serán los reyes del comercio y de los bancos y serán también el poder detrás de los políticos del mundo. Los negocios pequeños serán fusionados por grandes compañías y las compañías más grandes se unirán entre ellas para incrementar utilidades.
El resultado son grandes compañías multinacionales que no tienen lealtad o compromiso con ninguna comunidad, estado, nación o pueblo, ya que su único compromiso es incrementar utilidades para los directivos y accionistas. El resultado son trabajadores que son poco más que campesinos y presidentes que son más y más reyes. Serán estos "reyes" los que apoyen al dictador mundial para proteger su riqueza y poder.
Se espera que todo el comercio, compra y venta, será controlado por una marca en la mano derecha o en la frente de cada persona que desee participar en la economía. Sólo aquellas personas con la marca podrán ser capaces de comprar y vender, pero la consecuencia de recibir esta marca es la condena eterna. Por lo tanto, NO RECIBA LA MARCA. Usted tendrá un tiempo muy difícil sobreviviendo, pero usted salvará su alma. Repito, no reciba la marca en su mano derecha o frente.
Otra cosa que se volverá a poner de moda después del arrebatamiento será la esclavitud.
El libro de Apocalipsis habla del tratado de esclavos después del arrebatamiento. Los esclavos serán, muy probablemente, Judíos y Cristianos (que se convirtieron después del arrebatamiento), pero también serán muchos niños y pobres que serán atrapados en la esclavitud.